El experimento Hofling, llevado a cabo en 1966 por el
psiquiatra Charles K. Hofling, es uno de los estudios más impactantes sobre
la obediencia a la autoridad en contextos sanitario. Inspirado por
los famosos experimentos de Stanley Milgram, Hofling diseñó este estudio para
analizar cómo los profesionales de la salud, enfermeras en el caso que nos
ocupa, reaccionan ante órdenes potencialmente peligrosas dadas por figuras de
autoridad, incluso si estas órdenes van en contra de las normas y del sentido
común.
El experimento evidenció lo vulnerable que puede ser el juicio
profesional frente a la presión de la autoridad, especialmente en entornos
jerárquicos como los hospitales.
Antecedentes históricos
La década de 1960 fue un período crucial para la psicología social,
, marcado por investigaciones sobre el poder de la autoridad en las decisiones
humanas. Stanley Milgram había demostrado, en
1961, cómo personas comunes podían cometer actos extremos bajo órdenes de una
figura autoritaria, incluso si eso implicaba dañar a otros. Inspirado por estos
hallazgos, Hofling quiso explorar cómo este fenómeno se manifestaba en un
entorno realista y profesional: un hospital.
La elección del entorno no fue casual, los hospitales
tienen una estructura jerárquica clara, en la que los médicos ocupaban
posiciones de autoridad sobre las enfermeras, quienes se encargan de
implementar las órdenes médicas. Hofling sospechaba que este sistema podría
facilitar comportamientos acríticos ante instrucciones cuestionables.
Diseño del experimento
El experimento se llevó a cabo en un hospital con enfermeras
reales, quienes desconocían que estaban participando en un estudio. El
procedimiento fue el siguiente:
Escenario planteado: Un médico ficticio (identificado como
«Dr. Smith») llamó a la sala donde trabajaban las enfermeras y les pidió que
administraran una dosis de un medicamento llamado Astroten a un
paciente. Este medicamento no existía, pero fue presentado como parte del
equipo habitual del hospital.
Instrucción problemática: El «Dr. Smith» solicitó una dosis
que superaba significativamente el límite seguro indicado en la etiqueta del
medicamento. Además, la orden iba en contra de las reglas del hospital, que
prohibían administrar medicamentos sin una orden escrita.
Respuesta esperada: Según el protocolo médico y las reglas
éticas, las enfermeras debían negarse a cumplir la orden, ya que era potencialmente
peligrosa y no contaban con una orden médica legítima.
Registro de comportamiento: Los investigadores observaron si
las enfermeras seguían la instrucción o se negaban a administrarla.
Resultados
Los resultados fueron sorprendentes y alarmantes:
De las 22 enfermeras participantes, 21 estuvieron dispuestas a
cumplir la orden de administrar la dosis peligrosa, a pesar de que sabían
que iba en contra de las normas del hospital.
Solo una enfermera se negó a obedecer, citando las reglas
establecidas y el potencial daño al paciente como razones.
Estos resultados indicaron que la mayoría de las enfermeras estaban
dispuestas a priorizar la obediencia a la autoridad sobre su propio juicio
profesional y las normativas de seguridad.
Explicaciones y análisis
El experimento de Hofling reveló varios factores psicológicos que
influyen en la obediencia en contextos jerárquicos:
1.
Confianza
en la autoridad: Las enfermeras confiaban en que el «Dr. Smith», como
figura médica, sabía lo que hacía, incluso si sus órdenes contradecían las
reglas.
2.
Presión
de rol: La estructura jerárquica del hospital reforzó la idea de que las
enfermeras debían seguir las órdenes del médico, asumiendo un rol subordinado.
3.
Ambiente
cotidiano: A diferencia de los experimentos de laboratorio, el estudio de
Hofling se realizó en un entorno cotidiano, lo que hacía más probable que las
enfermeras actuaran como lo harían normalmente, sin sospechar que estaban
siendo observadas.
Impacto y aplicaciones prácticas
El experimento tuvo un profundo impacto en la comprensión de
la ética médico/sanitaria y la obediencia profesional, con
implicaciones en múltiples áreas:
Capacitación en salud: Los
resultados subrayaron la necesidad de capacitar a los profesionales sanitarios
para cuestionar órdenes que puedan poner en peligro la vida de los pacientes.
Esto llevó a desarrollar programas que promueven el pensamiento crítico y la
toma de decisiones autónoma en situaciones de riesgo.
Ética: Destacó la importancia de
establecer sistemas que permitan a las enfermeras y otros profesionales
cuestionar órdenes sin temor a represalias.
Psicología social: El
estudio reforzó los hallazgos de Milgram y otros investigadores, mostrando que
la obediencia a la autoridad no se limita a contextos experimentales, sino que
también afecta decisiones en el mundo real.
Críticas y limitaciones
Aunque el experimento de Hofling ofreció valiosos conocimientos,
también generó críticas:
Ética del estudio: Las
enfermeras no dieron su consentimiento informado, lo que podría haberlas
expuesto a estrés psicológico al descubrir que estuvieron dispuestas a cometer
un error potencialmente mortal.
Generalización: Algunos
críticos argumentaron que las condiciones del experimento no reflejaban con
precisión todas las dinámicas de los entornos hospitalarios.
Cambios culturales: Los
defensores del personal de enfermería señalaron que los resultados reflejaban
una época en la que las enfermeras tenían menos autonomía en comparación con la
actualidad.
Conclusión
El experimento de Hofling es un recordatorio
contundente de cómo el poder de la autoridad puede influir en el comportamiento
humano, incluso en entornos profesionales donde las decisiones tienen
consecuencias graves. Más allá de sus implicaciones teóricas, este estudio
subrayó la importancia de fomentar una cultura de seguridad y pensamiento
crítico en el ámbito de la salud.
La investigación de Hofling sigue siendo relevante hoy en día, pues
plantea preguntas sobre cómo equilibrar la obediencia y la responsabilidad
personal en profesiones donde las decisiones pueden ser literalmente de
vida o muerte. Al hacerlo, no solo enriquece la psicología social, sino también
la ética y la práctica sanitaria.
___________________________________________
Desde 1966 a la actualidad tanto las leyes, normas, protocolos, etc., han cambiado tanto, no solo en España, para la profesión enfermera como para pacientes y para la sociedad en general, que posiblemente no se podría hacer un experimento de este tipo. Aunque Divertimento piensa que viene bien recordarlo y más después de los comentarios que han suscitado las dos últimas publicaciones.
Más información y fuentes:
https://www.psiconetwork.com/el-experimento-del-monstruo-de-hofling/
https://www.simplypsychology.org/hofling-obedience.html
https://es.pinterest.com/pin/313703930314542933/