viernes, 28 de octubre de 2016

Nurse 3D. / Enfermera 3D. Cine.

Esta película se presenta como perteneciente al género de terror pero se puede apreciar que contiene más que la violencia y la sangre que caracterizan a este género, la sensualidad de su personaje principal es uno de los fuertes de este largometraje, encarnado por la hermosa modelo y actriz de origen español Paz de la Huerta.




El guión nos habla de la  historia de Abby Russell, una enfermera tan dedicada a su trabajo, que nadie dudaría en confiarle su vida. Sin embargo, cuando llega la noche se transforma… y usando su ardiente sexualidad como señuelo, por las noches sale en busca de hombres infieles a los que seduce para luego castigarlos y darles muertes brutales. Sin embargo, la historia cambia rotundamente cuando aparece otra enfermera que se convertirá en la obsesión de la protagonista.

Ficha técnica:
Nurse 3D (Enfermera 3-D) -- Thriller - Terror.
2013--  83 min.  País - Estados Unidos
Director. Douglas Aarniokoski.
Guión: Douglas Aarniokoski, David Loughery
Música: Anton Sanko.
Fotografía: Boris Mojsovski.
Reparto: Paz de la Huerta, Karina Bowden, Corbin Bleu, judd Nelson, Boris Kodjoe, Niecy Nash, Adam Herschman, Melanie Scrofano, Lauro Chartrand, Layton Morrison, Yulia Luki, Joe Macleod.

La opinión de un espectador:
"Nurse" es de esas películas que, aun sabiendo que es un despropósito, también sabes que vas a disfrutarla más allá de su valía artística. Desnudos, sangre y sexo por doquier, todo ambientando en un hospital con una Paz De La Huerta espectacular, adueñándose de todas las escenas con un despliegue físico prodigioso. Tampoco es un Shakespeare así que hacerse dueña de las escenas significa actuar correctamente y tener un físico icónico. "Nurse" es como esas novelas  de sexo y asesinatos donde todo vale. Su guión no busca complicados giros argumentales e incluso tiene la decencia de simplificar el producto para que el espectador disfrute con la forma (y las curvas femeninas) sobre el fondo. Porque de eso trata "Nurse", de disfrutar con un amplio catálogo de desmembraciones, sexo gratuito y Paz De La Huerta calentando al personal (mujeres y hombres por igual). Si no sois demasiado exigentes, os gusta el gore y entendéis el producto como una parodia (y no como una película machista), entonces "Nurse" os encantará.


Más información y fuentes:
Información sobre Maria de la Huerta: https://es.wikipedia.org/wiki/Paz_de_la_Huerta


jueves, 20 de octubre de 2016

Enfermeras en hospital de sangre. Carteles y foto.


Imagen de cartel con enfermera en plano central, con cofia sobre la que lleva el distintivo de La Cruz Roja, y escenas bélicas a ambos lados. En la base el mensaje de "ayuda a los hospitales de sangre". En la parte superior derecha tal como se mira la imagen, la descripción aunque dificultosa de la CNT -AIT, organización responsable. 


Un hospital de sangre es un hospital provisional que se sitúa en un punto conveniente cerca del sitio donde se da una acción bélica, y donde se recibe muchas veces a los heridos de uno y otro bando. 
También se denomina así a algunos hospitales militares, aunque se hallen dentro de población.

        Cartel de la guerra civil española, bando republicano. 1936-39.

             Museo histórico de enfermería : Fundación José Llopis 

El origen de estos establecimientos fue la necesidad reconocida de auxiliar pronta y eficazmente a los heridos de una acción que por falta de hospitales morían en gran número y sin socorro, ni auxilio alguno. 

Estos hospitales ambulantes tienen en la guerra un carácter tan sagrado que aun en los momentos de más calor y efervescencia han sido respetados. Se han salvado muchas víctimas desde la creación y es admirable la gran ayuda que representan en los momentos en los que a ellos se conduce a los heridos de una acción bélica. 


                           Cartel de la guerra civil española, bando republicano. 1936-39.                                                                                                     Museo histórico de enfermería : Fundación José Llopis 
En éste segundo cartel aparece en primer plano un miliciano, en tono de color marrón apagado, que con fusil en alto, va en avance, sobre un fondo de luz donde se ve la imagen de una enfermera, donde su rostro y cofia con el signo de la Cruz Roja ocupan la parte central del cartel, entre los brazos y fusil del miliciano.
Sobre el ángulo superior derecho el texto "Hospital de Sangre" y Guarderías de niños. 
Comité Organizador. CNT/Confederación Nacional del Trabajo -AIT/Asociación Internacional de los Trabajadores (Valencia).

En la Guerra Civil Española el Hospitales de Sangre, no fue exclusivo de la parte republicana pero si dónde más existieron. 

Entre otros muchos frentes, en la defensa de Madrid, donde la mayoría de ellos fueron consecuencia de que el ministerio de Sanidad y el Ayuntamiento de Madrid aprobaron que diversos edificios como el Hotel Ritz de Madrid (en este último muere Buenaventura Durruti el 19 de diciembre de 1936) y el Palace fueran destinados a albergar Hospitales de Sangre.


Enfermera del Hospital de Sangre de Buitrago Madrid, 1936.
Luis Ramón Marín, autor de la foto de la enfermera, fue un reportero gráfico, que habría de revolucionar la prensa escrita. Durante treinta años desarrolló una extraordinaria actividad publicando más de mil fotos por año sólo en un periódico, " Informaciones" a lo que hay que añadir su colaboración en todas las revistas gráficas de la época. Su última dedicación fue  la de fotografiar la guerra civil desde el Madrid sitiado. Terminada la guerra sus fotografías –por las obvias circunstancias- desaparecen de los periódicos. Y desde entonces el olvido. Lucía Ramón Plá, hija del fotógrafo conservó el excepcional archivo fotográfico y además legó a la Fundación Pablo Iglesias,  18.296 fotografías, legado familiar de Marín depositado en la Fundación.

Más información y fuentes:


viernes, 14 de octubre de 2016

Enfermera comprobando el aparataje asistencial en UCI.

Preparados y ALERTA al ingreso.
Enfermera comprobando el equipo de vigilancia para un paciente en la sala de cuidados intensivos. Foto de Colecciones Culturales, Universidad de Newcastle.
Preparación, comprobación y alerta, podrían ser 3 de las palabras que es necesario realizar al inicio de todo jornada de trabajo, en cualquier unidad asistencial, ésta foto que ha tenido la amabilidad de enviar para su publicación, María Jesús Prado estudiante de 4º año de Grado en Enfermería, me recuerda aquellos turnos en UCI, cuando ante una cama o puestos libres y pendientes de recibir a una persona para cuidarla, circunstancia que puede suceder en cualquier momento, se hace necesario, preparar todo el aparataje, útiles, aspirador, respirador, por aquel entonces escaseaban las  bombas de perfusión, líneas de goteros, etc. Y si ya estaban listos por los compañeros del turno anterior, comprobar su funcionamiento.
Hospital Royal Newcastle a finales de 1960.
Actualmente y con el aporte de la C.I.E. (Clasificación de Intervenciones de Enfermería), lógicamente se trata de una intervención indirecta pues es un tratamiento/actividad realizado sin el paciente pero en beneficio del mismo o de un grupo de pacientes. 

Os hablo de la década de los años 80 del siglo pasado, fue mi primer trabajo (ATS entonces).
Las Unidades de Cuidados Intensivos iniciaron su desarrollo en España en la década de los 60, creándose la primera de ellas en la Fundación Jiménez Díaz de Madrid en el año 1965. En los inicios unos cuantos profesionales, hoy día, ha aumentado su número y su rol profesional, la plantilla de profesionales enfermeros en nuestro país supera los 20.000, que son quienes sustentan todas las infraestructuras de la UCI, al soportar el gran volumen de trabajo durante las 24 horas del día, en turnos de mañana, tarde y noche.
Posdata: Recuerdo cuando nos llegó el “machaca” es decir el compresor que funcionaba  a presión de oxígeno para RCP, que nos liberaba en parte del agotador masaje cardiaco. Todo un acontecimiento.



lunes, 10 de octubre de 2016

Enfermeras atendiendo a pacientes psiquiátricos.1936

Por el día mundial de la enfermedad mental.

En los años 30, el fotógrafo  Alfred Eisenstaedt realizó para la revista LIFE numerosas fotografías de enfermos mentales en distintos psiquiátricos norteamericanos.

A. Eisenstaedt  recogió con su cámara imágenes realistas y muy impactantes acerca de cómo era la vida cotidiana de estos enfermos. Estas personas, hacinadas en grandes edificaciones, eran sometidas contra su voluntad a las terapias de moda de aquella época (lobotomías, coma insulínico...) y, aunque algunas mejoraban (por ejemplo, el electroshock era eficaz en ciertos casos), muchas sufrían daños profundos e irreparables. 


Uno de los psiquiátricos que visitó Eisenstaedt fue el Pilgrim State Hospital, construido de 1930 a 1941. Fue creado para albergar a 12.500 pacientes pero, durante algún tiempo, su población ascendió a 16.000, y llegó a convertirse en el asilo para dementes más grande del mundo.





Entre los tratamientos que se empleaban en Pilgrim State Hospital se encontraban peligrosas terapias de choque, que podían tener cierto grado de eficacia pero que suponían un enorme riesgo para la salud e, incluso, la vida del paciente. Por ejemplo, se empleaba la terapia del coma insulínico o cura de Sakel (descubierto por Manfred Sakel fortuitamente en 1933). Consistía en administrar insulina hasta lograr el coma hipoglucémico. Los pacientes debían permanecer en este coma de 15 a 60 minutos. Esta terapia, que solía durar unos sesenta días, generalmente se empleaba para el tratamiento de la esquizofrenia. El coma insulínico se introdujo en el hospital Pilgrim a partir de 1936.


Pilgrim State Hospital
También se aplicaba la tonoclonoterapia cardiozólica para la esquizofrenia. Consistía en inyectar un medicamento llamado Cardiazol, que ocasionaba terribles convulsiones.
Con el tiempo, el electroshock reemplazó al cardiozol. Las corrientes eléctricas fueron utilizadas sobre todo para tratar  a los esquizofrénicos con delirios o alucinaciones y a los enfermos con depresiones muy graves. A partir de 1940 el hospital comenzó a emplear este tratamiento, que en aquellos tiempos se realizaba sin anestesia.

Desde el año 1946 empezaron también a practicarse lobotomías, que fueron muy numerosas en la década de los 50. Miles de personas fueron objeto de esta terrible intervención quirúrgica en el Pilgrim State Hospital.


Otro angustioso tratamiento era la hidroterapia, que comenzó a utilizarse en los hospitales psiquiátricos a partir del 1900. La técnica consistía en sumergir en una bañera llena de agua al paciente para lograr que se relajase si estaba agitado o para aliviarle alguna dolencia física. El enfermo podía pasar allí desde unas pocas horas hasta toda la noche.
El paciente se colocaba dentro de la bañera con agua tibia o caliente. El agua constantemente estaba circulando, entraba por los lados de la bañera y salía por el desagüe. La temperatura era regulada por una enfermera, que también atendía las necesidades que tuviese el enfermo. Unas lonas cubrían completamente la parte superior de la bañera, salvo una pequeña abertura, por la que sobresalía la cabeza del paciente.
Las lonas tenían diferentes finalidades: servían para mantener constante la temperatura del agua, como superficie para depositar las bandejas con los alimentos y como modo de controlar a los pacientes violentos (evitándose así el uso de la camisa de fuerza).
A medida que fue incrementándose el número de pacientes en los psiquiátricos, este tipo de tratamiento, que requería numeroso personal capacitado, fue cayendo en desuso. Muchas salas de hidroterapia dejaron de utilizarse durante los años 40 y 50.

El electroshock se sigue practicando en el siglo XXI. En 2005, la Organización Mundial de la Salud estableció que sólo podría administrase tras obtener el consentimiento del paciente. No obstante, en algunos países, como Estados Unidos, una orden judicial, tras una audiencia formal, permite que un paciente pueda ser obligado a someterse a electroshock.
http://www.ovejaselectricas.es/2010/07/besos-y-demencia-tras-la-misma-lente.html

http://www.oldskull.net/2015/02/la-vida-en-un-hospital-psiquiatrico/




viernes, 7 de octubre de 2016

Primeras prácticas.

Esta semana ha comenzado, un estudiante, su rotación de prácticas de 3º año de enfermería, en mi consulta, y como no, me ha venido a la menoría aquellos días en los que yo comenzaba de igual forma, con ganas de hacer de todo lo que hubiera que hacer y más aún.


 Y desde luego antes de hacer nuestros primeros “pinitos” con los pacientes y a falta de ellos, nos teníamos a nosotros mismos.
Quién no se dejó vendar, pinchar, etc. por nuestros propios compañeros de promoción.

Fuente de la foto:
http://www.ananasamiami.com/2011/07/vintage-nurses.html

miércoles, 5 de octubre de 2016

Día de la banderita.

Winston Churchill, siendo primer ministro británico, es abordado el día de la banderita por ENFERMERAS de la Cruz Roja para pedirle su colaboración.
Hoy 5/10/16, se celebra en el Reino de España el día de la banderita, el objetivo es recaudar dinero a favor de la Cruz Roja poniendo una pegatina de papel cuadrada en la solapa de los donantes. Las personas que hacen el pedido generalmente van a pie o sentadas tras una mesa en las calles en los puntos más señalados de las ciudades, piden una aportación económica con huchas blancas con el logotipo de la organización.
Se popularizó este día en una película española en 1956 titulada “Las chicas de la Cruz Roja”. El acto es presidido por la Reina de España, como Presidenta de Honor de Cruz Roja Española.
En 1975 ganó un premio en Cannes el director josé Luis Borau por un anuncio del "Día de la Banderita".


El asunto no es estrictamente un tema español, como podéis suponer, y de una u otra forma, en diferentes zonas de globo y de forma similar, se llevan a cabo intervenciones recaudatorias, como se ve en las fotos.


Más información y fuentes: