Tras prohibirse en 1932 los grupos artísticos
independientes en toda la URSS, en 1934, en el I Congreso de Escritores Soviéticos, la ideología del partido comunista impuso el realismo
socialista como único lenguaje artístico permitido. Dentro de este contexto del arte y en concreto en la pintura hubo varios autores que dejaron reflejadas en sus obras la aportación de las enfermeras con su espíritu de sacrificio y abnegación hasta en algunos casos poner en peligro su vida en beneficio del pueblo. Un ejemplo de ello es el homenaje en los 70 años del aniversario de la II Guerra Mundial y que los rusos denominan “Gran Guerra Patriótica”, que celebran cada año en el mes de mayo la victoria sobre el nazismo.
Cinco obras de enfermeras uniformadas con la bata blanca:
|
Enfermera en un minuto libre. 1945. G.M. Shegal. |
|
Retrato de la enfermera Regita Daggelet 1955. Kudelkin Victor. |
|
Enfermera 1955. Mikhail Mikhilovich. |
|
La enfermera militar Natasha Mikhaleva. S. Uranov. |
|
En la enfermeria. V.G. Vladimirov. Década de 1970. |
Durante el periodo del régimen soviético
en toda la URSS el régimen totalitario controlaba todas las esferas de la vida
de los ciudadanos y por supuesto también en el proceso artístico. La función
principal del arte fue la de trabajar en la implementación de propaganda con el
propósito del “adoctrinamiento ideológico y en la educación del pueblo en el
espíritu del socialismo”. Así el denominado el realismo socialista se convirtió
en un método creativo obligatorio para todo el arte soviético. El régimen pidió
a los artistas que trabajaran en la creación de una imagen convincente de un
estado unitario, justo y próspero en el que, gracias a la victoria del socialismo,
cada ciudadano es feliz y lleno de entusiasmo por el trabajo.
En los primeros años del régimen se
trataron que incluían una amplia gama de tradiciones cultivadas desde el arte Arcaico al Constructivismo, pero a partir de mediados de los años 30, a diferencia
del arte burgués, no debía ser creado para museos, galerías,
coleccionistas particulares ni especialistas, sino que su único consumidor era
el propio Estado Socialista.
Siguen aquí unas obras que muestran a las enfermeras en su labor propia de cuidados a los necesitados en las zonas de actividad bélica en las que también son portadoras de armas:
|
Nuestras Camaradas. 1982. L.I. Valshlya. |
|
Enfermera 1976. Likhonosov Vladimir |
|
Camarada, 1954. Marat Samsonov. |
|
Enfermera Natasha. Nikolai Booth. |
|
Enfermera. A. Safargalin |
La cultura estalinista se proyectó de
una forma anticomercial, con el único objetivo de educar y sobre todo dirigir a
las masas.
Los artistas de mayor éxito que
trabajaron esta línea fueron Alexander Gerasimov y Vasily Efanov. Estos crearon los retratos de los
líderes del Partido Comunista y jefes militares, sus espectaculares imágenes de
desfiles, solemnes reuniones, visitas y acontecimientos de importancia se
difundieron a través de medios impresos.
Estas obras “oficiales” fueron el
núcleo ideológico del arte del realismo socialista, cumpliendo una de sus
principales misiones: la creación y el mantenimiento del culto a la
personalidad de Josef Stalin y otros líderes soviéticos. Una gran cantidad de
obras de todo tipo de arte se dedicó a episodios reales y míticos de sus biografías,
para representarlos en las imágenes como revolucionarios heroicos, guerreros,
líderes sabios, “amigos del pueblo”.
Un lugar importante en el complejo
temático del realismo socialista fue ocupado por obras dedicadas al trabajo.
Los artistas cantaron los éxitos de la industrialización, la construcción y la
agricultura; en el camino de la colectivización, alabaron a los obreros y los
campesinos. Muchos artistas dedicaron su trabajo al ejército y la armada:
maniobras militares y desfiles, retratos e imágenes colectivas de soldados y
comandantes, el equipamiento militar, la historia revolucionaria de las fuerzas
armadas soviéticas.
Las brillantes imágenes del arte
soviético están dedicadas también a los temas de la juventud, la cultura física
y el deporte. Del mismo modo tenían un significado ideológico, ya que las
imágenes de la juventud soviética, criada por el poder soviético, personificaban
el brillante futuro del país.
|
B.M. Nemensky. Masha. 1956. |
|
Likhonosov Vladimir. En la enfermeriael batallon medico. |
|
Mikhail Natarevich. Del hospital en 1954. |
|
Platonov Yuri. Sin nombre 1991. |
La idea utópica de crear un hombre
nuevo, comunista convencido, cuerpo perfecto y fuerte espíritu, encuentra en
estas obras contornos visibles. En el marco de este tema, los artistas tenían
más libertad para trabajar con la forma, lo cual fue facilitado por los mismos
ejercicios deportivos con sus movimientos y poses. Los principales maestros en
esta área eran Alexander Deineka y Alexander Samojválov.
En el contexto general del realismo
socialista, una variedad de géneros, temas y temas podría adquirir un significado
ideológico. El canon existente del trabajo realista socialista, además de la
veracidad ideológica, sugería espectacularidad, narración, didacticismo. Estaba
dirigido a los sectores más amplios de la población y formó un mito optimista
sobre la implementación de la utopía comunista.
|
Vakhtang Akhvlediani. Qué jóvenes éramos. 1969. |
Todo un ejército de maestros trabajó
en la creación de este mito, muchos de los cuales lograron crear obras impresionantes
y que demostraban un gran talento.
Estas obras también han formado parte de uno de los videos dedicado al 70 aniversario de la Gran Victoria en 2015, como reconocimiento a las enfermeras de Servicio Sanitario Sovietico, con acompañamiento musical de Alexey Rybnikov del final de la película rusa "Estrella", de 2003.
Más información y fuentes:
No hay comentarios:
Publicar un comentario